Nuria Martín Sanz
La ola de calor que se ha instalado en Madrid durante el mes de julio no da tregua. Emmanuel y Alberto, de 14 y 12 años, pasan la mañana jugando al conocido juego de cartas ‘Uno & friends’. Las risas y bromas propias de su edad se entremezclan en la divertida sala donde se encuentran, en la que modernos robots, como recién sacados de un videojuego, protagonizan la decoración. Cualquiera diría que están en una sala de cómics o de juegos, pero nada más lejos de la realidad: los dos chavales están en pleno tratamiento de diálisis en el madrileño hospital de La Paz.
Un estudio demuestra que no hacen falta nuevos fármacos, sino aplicar bien los que hay
El dolor es el primer síntoma que refieren las personas con una enfermedad renal. “Es en las piernas, en la espalda”, dice Roberto Martín, director médico de la Fundación Íñigo Álvarez de Toledo. “Pero también a veces la diálisis produce alteraciones en los huesos, y eso puede llevar a un dolor crónico”. La buena noticia para ellos —aunque lleva una carga de crítica importante para el sistema sanitario— es que la fundación ha hecho un estudio en el que ha demostrado que la mitad de las personas dejan de referir después de un periodo de formación a los profesionales que les atienden.
A través de un nuevo proyecto llevado a cabo por Carburos Metálicos y la Fundación curArte se ha decorado la Unidad de Diálisis Infantil de La Paz. El objetivo: contribuir a mejorar el estado de ánimo y la calidad de vida de los niños hospitalizados.
Fuente: Es tu sanidad, 27/7/ 2015. Marcos Domínguez. Madrid
Mientras nos extienden una receta en la consulta, o cuando adquirimos las medicinas en la farmacia, médico y farmacéutico nos suelen hacer recomendaciones que ya suenan a clásicas: “Tómatela después de las comidas”, “que sea en ayunas”, etc. Sin embargo, los efectos de los alimentos que comemos sobre la medicación es algo a lo que los investigadores no prestaron demasiada atención hasta hace relativamente poco.
Una investigación refleja que trabajar durante las horas sin luz solar multiplica el riesgo de tumor mamario.
Los problemas a la hora de dormir no solo influyen en nuestro humor. Un reciente estudio publicado en la revista Current Biology ha demostrado que los patrones de sueño irregular asociados a los turnos nocturnos de trabajo multiplican el riesgo de padecer cáncer de mama.
La investigación, que analiza el efecto sobre ratones, apunta a varios factores relacionados con los horarios laborales de noche que explican tal causalidad: la desincronización interna, las alteraciones del estilo de vida, la disminución de los niveles de vitamina D por la falta de luz y, en definitiva, una alteración de nuestro reloj biológico, son algunos de los parámetros que explican tal causalidad.