Resumen:
La historia de la Hemodiálisis domiciliaria comenzó en los años 60, eran muy pocos los hospitales que contaban con la terapia de diálisis, por la falta de espacio, recursos humanos y económicos y esta escasez fue la que hizo que se desarrollasen programas de Hemodiálisis Domiciliaria(HDD). Tras su éxito inicial se produjo un declive por diversos motivos.
En los 70 se empezaron a crear más unidades de hemodiálisis y se desarrolla la DPCA, por lo que desapareció casi totalmente la HDD. En nuestro hospital contamos con una consulta de Enfermedad renal crónica avanzada de Enfermería donde se oferta también esta nueva modalidad para nuestra Unidad, la HDD.
Para ello pusimos en marcha hace seis años un programa de entrenamiento.
Nuestro objetivo es describir nuestra experiencia con la hemodiálisis diaria domiciliaria con los diez pacientes que han optado por ella.
Aparentemente no todos los pacientes son candidatos por lo que hemos establecido una serie de requisitos: condición biológica adecuada, mínima capacidad de aprendizaje, motivación, buen acceso vascular , contar con una persona de ayuda y disponer de un espacio y condiciones higiénico-sanitarias mínimas.
De estos 10 pacientes podemos decir que la edad media era + 61 de años, la distancia media al centro hospitalario de 42Km, mientras que la permanencia en la técnica de 32+ 17 meses. Cinco lo habían elegido como primera opción, 3 procedían de Diálisis Peritoneal y dos de un centro concertado.
La duración del entrenamiento ha sido de una media de + 30 sesiones. En todos los casos disponían de apoyo familiar bien los hijos o cónyugue.
En nuestra unidad hemos elaborado un entrenamiento flexible que nos ha garantizado tranquilidad al paciente y familia. En todo momento hemos desaconsejado que el paciente se halle sólo en su domicilio en el momento de la HD.
Es muy importante que el paciente se sienta apoyado en su domicilio tanto por un familiar como con nuestro equipo. La hemodiálisis domiciliaria no es una opción irreversible, ya que la posibilidad de volver a dializarse en el hospital o en un centro siempre queda abierta.
Varios estudios avalan los beneficios de la hemodiálisis diaria, pero debido a las dificultades que se tiene en las unidades para poder desarrollarlas, la hemodiálisis domiciliaria diaria, sería una opción de tratamiento del futuro para pacientes estables. Para potenciar la HDD necesitamos dar tranquilidad al paciente a la hora de solucionar los posibles problemas que se le presenten en casa y la implicación de las instituciones ya que en la actualidad es el único tipo de hemodiálisis que permitiría reducir el intervalo dialítico en muchos pacientes. En nuestra experiencia es una modalidad personalizada, segura, que permite al paciente seguir con su rutina diaria a la vez que es una modalidad terapéutica útil y susceptible de ser realizada por cualquier Servicio de Nefrología. Nuestro trabajo no permite obtener resultados estadísticos significativos, pero estamos convencidos que puede ayudar a otros compañeros a dar un primer paso y decidirse por esta opción terapéutica.